En los cultivos hidropónicos, las plantas completan su ciclo vegetativo sin la necesidad de emplear el suelo. Se les suministra la nutrición hídrica y la totalidad o parte de la nutrición mineral a través de una solución en la que van disueltos los diferentes nutrientes esenciales para su desarrollo.
El futuro de la agricultura moderna pasa por el uso óptimo de uno de sus recursos más limitados y más importantes: el agua. Se hace imprescindible que en los días venideros la agricultura adopte métodos de cultivo que optimicen al máximo el uso del agua y esto se consigue gracias a los cultivos hidropónicos.
Cultivo de tomate en perlita.
Si comparamos la cantidad de agua necesaria, en litros, para producir un kilo de tomates con los diferentes métodos de cultivo que existen en la actualidad, vemos cómo los cultivos hidropónicos son los que menos agua consumen. Así:
– Cultivo a campo abierto: 60 litros por cada kilo de tomate.
– Cultivo hidropónico en invernadero sin recirculación de drenajes: 22 litros por cada kilo de tomate.
– Cultivo hidropónico en invernadero con recirculación de drenajes: 10 litros por cada kilo de tomate.
– Cultivo hidropónico en invernadero de alta tecnología con recirculación de drenajes: 4 litros por cada kilo de tomate.
Consumo de agua por kilogramo de tomates.
Fuente: Van Kooten et al. New development in greenhouse technology can mitigate the water shortage problem in the 21st Century. Acta Hort 767. P45-51.
De esta manera observamos como los cultivos hidropónicos y la alta tecnología dentro de un invernadero hacen posible un ahorro de casi el 95% del agua de riego.
Los cultivos hidropónicos requieren una especial atención en cuanto a las condiciones que rodean a la planta (humedad relativa, temperatura, radiación, etc.) en un entorno controlado, por lo que es necesario que el cultivo hidropónico se encuentre protegido dentro de un invernadero.
Cuanta mayor sea la tecnología implementada en el invernadero donde se encuentren nuestros cultivos hidropónicos, más grande será el control sobre todos los parámetros, lo que derivará en un mayor ahorro en agua y una mayor producción.
La agricultura del futuro podrá hacer frente al gran reto de obtener más producción con menos recursos gracias a los cultivos hidropónicos.
